Creo que Angry Birds ha sido el juego de los últimos años, aunque como todo, ha ido perdiendo esa frescura que tenían cuando salieron, sobre todo, quizás, porque le han salido muchos competidores, y porque en los móviles ya se aceptan otros juegos que atraen más. Otro de sus fallos es querer cobrar por todo, que en un principio está bien, pero se convierte descaradamente en un Pay to win. A pesar de todo esto, quienes han disfrutado del primer juego, revivirán una experiencia diferente, que siempre gustará volver a jugar unas partidas, aunque ya sepas exactamente donde tienes que lanzar a tus pájaros para hacer caer a los cerdos.